La música clásica es algo más que un agradable ruido de fondo; en realidad puede hacerte más saludable. Así es como Mozart y Vivaldi pueden ayudarte a ser más inteligente, más saludable e incluso a descansar bien durante la noche.
1. La música clásica reduce la presión arterial
Un estudio publicado en el Journal of Health Psychology encontró que los participantes que escuchaban música clásica tenían niveles de presión arterial significativamente más bajos que los participantes que no escuchaban música. Los investigadores creen que escuchar música puede ayudar a tu corazón a recuperarse del estrés, disminuyendo la presión arterial como resultado.
2. La música clásica te hace más emocional
Escuchar música puede inspirar hasta a la persona más apática a sonreír. Investigadores de la Universidad Southern Methodist observaron a los voluntarios mientras escribían sobre el evento o experiencia más importante de sus vidas. Encontraron que los participantes que tenían música clásica de fondo mientras escribían se volvían más vulnerables emocionalmente y más dispuestos a revelar información que los que no lo hacían. Y estos beneficios se extienden más allá; ser más consciente y controlar tus emociones es una gran manera de mantener relaciones mejores y más saludables.
3. La música clásica te ayuda a dormir
La música clásica puede ser un remedio casero fácil para los dormilones inquietos. Un estudio del 2006 encontró que los estudiantes con trastornos del sueño dormían mejor cuando se dormían con música clásica que aquellos que no se dormían con música. Prueba música que tenga un ritmo regular, tonos bajos y melodías tranquilas, cualidades que se cree que son más efectivas para mejorar la calidad del sueño. Si todavía te despiertas exhausto después de una noche completa de sueño, puede ser una señal de que no estás durmiendo lo suficientemente profundo.
4. La música clásica alivia el dolor
Decir adiós al dolor puede ser tan fácil como poner en marcha tu aplicación musical favorita. Las investigaciones han demostrado que la música puede ser efectiva para disminuir el dolor entre los pacientes quirúrgicos y de cáncer. Un estudio del 2006 encontró que los grupos con dolor crónico que escuchaban música reportaron sentir menos dolor y más poder sobre su depresión y discapacidad que aquellos que no lo hacían. Los investigadores sugieren que la música empodera a los pacientes que se recuperan de la cirugía e incluso anima a las enfermeras a usarla como herramienta de rehabilitación.
5. La música clásica puede hacerte más inteligente
En 2001, los sujetos que escucharon una sonata de Mozart durante sólo 10 minutos mostraron un coeficiente intelectual que fue casi 10 puntos más alto después del estudio que antes. Los investigadores explicaron que se cree que la música clásica mejora el razonamiento espacial temporal del cerebro, o la comprensión cognitiva de cómo los objetos o piezas pueden encajar en un espacio. Es cierto que el «Efecto Mozart» es polémico. Otros son escépticos de estos hallazgos, citando la necesidad de apreciar conscientemente la música para cosechar sus beneficios. Aún así, no puede hacer daño poner un poco de música barroca durante el día.
6. La música clásica mejora la memoria
La próxima vez que necesites estudiar para una gran prueba o presentación, haz de Beethoven tu compañero. En un estudio publicado en Learning and Individual Differences (Aprendizaje y diferencias individuales), un grupo de estudiantes escuchó una conferencia de una hora en la que se tocaba música clásica de fondo, y el otro grupo escuchó la conferencia sin música. Los del primer grupo obtuvieron una puntuación significativamente más alta en una prueba que los del segundo grupo. Los investigadores creen que la música hace que los estudiantes sean más receptivos a la información, lo que les permite almacenarla y recuperarla más eficientemente.
7. La música clásica alivia la ansiedad
Los científicos han descubierto que escuchar música clásica puede ayudar a reducir el estrés al reducir los niveles de cortisol en el cuerpo. En un estudio, las mujeres embarazadas informaron que escuchar un CD de música clásica cada semana aliviaba su estrés y ansiedad, según investigadores de la Universidad Médica Kaohsiung de Taiwán. Estos beneficios pueden aplicarse no sólo a las futuras madres; otro estudio encontró que los pacientes del hospital que escuchaban música en los auriculares reducían su ansiedad antes y después de la cirugía.
8. La música clásica construye relaciones sociales
La armonía con los demás podría comenzar con la armonía en la música, según una nueva investigación. Un estudio publicado en 2014 en Aging Mental Health encontró que entre aquellos con demencia, la música servía como una herramienta para sentirse conectados con otros porque los sujetos podían tocar y discutir la música juntos. Las familias también han reconocido los aspectos comunitarios de la conexión musical, ya sea cantando canciones juntos o participando en sesiones de terapia musical, según el mismo estudio. Toma una guitarra o el piano e invita a otros a disfrutar de la música contigo; las notas pueden ser de gran ayuda para acercarte a ellos.
9. La música clásica te hace más productivo
Cuando se tocaba música barroca en la sala de lectura de los hospitales, los radiólogos informaron que su precisión, productividad y satisfacción laboral aumentaban, según una investigación de la Universidad de Maryland y el Sistema de Salud de la Universidad de Pensilvania. Un poco de Bach entrando por tus auriculares podría dejarte silbando mientras trabajas.
10. La música clásica te ayuda a relajarte
No tienes que pagar por un costoso spa o masaje para cosechar los beneficios de un poco de descanso y relajación. Un estudio publicado en el Journal of Behavioral Medicine encontró que los sujetos expuestos a la música clásica experimentaron una reducción en la actividad cerebral y una disminución en la frecuencia cardíaca, lo que los llevó a sentirse más relajados.