Hace un par de años, pedí a varios de mis colegas que dieran su opinión sobre el título de mi nuevo libro, «Constructores de puentes: Cómo los comunicadores excelentes consiguen lo que quieren en los negocios y en la vida»«.
Uno de sus comentarios me sorprendió: «No estoy seguro de la parte de ‘Conseguir lo que quieren’. Parece manipulador«, decía.
Su comentario suscitó una discusión y una aclaración sobre las diferencias entre la persuasión y la manipulación, así que empecemos por ahí.
Una persona persuasiva es capaz de inspirar a la gente a hacer o creer algo mediante el poder de una comunicación excelente y acciones inspiradoras.
Una persona manipuladora usa o controla a otras personas de una manera inteligente y calculada, a menudo con motivos ocultos, injustos o egoístas.
Dadas estas definiciones, aceptemos que Martin Luther King, Jr. era una persona persuasiva, mientras que Hitler era un manipulador.
Ahora, donde se pone difícil es que tanto la persuasión como la manipulación se basan en algunos instrumentos retóricos básicos que apelan a la lógica, las emociones y la ética de uno. La intención es la línea entre alguien que espera persuadirte hacia algo digno, mientras que los manipuladores hacen un mal uso de la retórica y la comunicación para lograr sus planes egoístas.
Dicho esto, considera estas ocho tácticas de comunicación que los manipuladores utilizan para conseguir lo que quieren:
- Manipulan tus emociones hasta que la idea de violar tus valores fundamentales parece lógica
- No respetan tus límites y ganan terreno poco a poco cada día
- Te convencen de que guardar secretos a la gente en la que confías es lo mejor
- Usan el conocimiento de tus debilidades para avergonzarte y la culpa te hace dudar
- Desvían la atención de sí mismos mediante el uso de preguntas de sondeo, luego usan sus propias respuestas en su contra para construir una discusión y obtener lo que quieren
- Utilizan la crítica sutil o abierta para quebrantar tu autoconfianza
- Decoran las mentiras con medias verdades o hechos fuera de contexto para que suene más creíble
- Ofrecen excusas plausibles pero difíciles de probar para justificar un comportamiento deplorable
No todos los manipuladores son creados iguales. Consideremos tres tipos (aunque puede haber más):
Manipuladores accidentales
No tienen conciencia de sí mismos pero no tienen la intención de hacer daño. Suelen ser comunicadores descuidados que quieren ser persuasivos pero no saben cómo hacerlo.
Manipuladores sobrevivientes
Ya han sido quemados, manipulados antes. Su lema es «manipular o ser manipulado».
Manipuladores de narcisistas
Dos palabras: PELIGRO y CORRER. Conseguirán lo que quieran a cualquier precio.
¿Y ahora qué?
Mantente alejado de los narcisistas manipuladores o saldrás lastimado. No intentes salvarlos. Deja eso a los profesionales. En vez de eso, sé un buen observador de sus tácticas. En el momento en que sientas que están violando tus valores y mintiendo a quienes se preocupan por ti, ¡CORRE!
En resumen: No le des ni un centímetro a las tácticas manipuladoras. Niégate a ser un manipulador. Conviértete en un constructor de puentes e inspira a otros a hacer lo mismo.