¿Luchas con el FOMO? Si es así, podrías estar… bueno… «perdiéndote algo».
FOMO es un acrónimo en inglés que quiere decir: «Fear of Missing Out» o «miedo a perderte algo». Los científicos definen el FOMO como «una aprehensión generalizada de que otros pueden estar teniendo experiencias gratificantes en las que uno está ausente«; en otras palabras, la sensación de que todo el mundo se está divirtiendo sin nosotros. A nadie le gusta sentirse excluido, y este miedo puede llevar a la gente a buscar una conexión constante con lo que otros están haciendo para no perderse nada. Pero FOMO tiene un coste. Según un número creciente de estudios de investigación, los niveles más altos de FOMO están vinculados a:
- Estado de ánimo bajo y niveles más altos de ansiedad y neuroticismo.
- Menor satisfacción y seguridad en las relaciones cercanas.
- Menor satisfacción de nuestras necesidades psicológicas (por ejemplo, sentirse conectado con otros).
- Más problemas con el consumo de alcohol.
- Mayor necesidad de aprobación de los demás.
El efecto más pronunciado de FOMO es un mayor uso de las redes sociales, incluyendo la adicción a las redes sociales, y no es de extrañar ya que el mundo de las redes sociales ofrece innumerables oportunidades para ver a personas que conocemos en eventos a los que no asistimos.
Si a menudo te encuentras preocupados por lo que te estás perdiendo, considera estos antídotos:
1. Concéntrate en lo que tienes frente a ti. FOMO puede llevarnos a revisar las redes sociales mientras hacemos otras cosas, como asistir a clase o salir con amigos. Si estás completamente comprometido con tu propia vida, es menos probable que te preocupes por lo que te estás perdiendo. Por consiguiente, nuestra propia investigación encontró una fuerte correlación entre la atención plena (que enfatiza el enfoque actual) y un FOMO más bajo.
2. Recuerda que las redes sociales son un espacio cuidadosamente curado. Las publicaciones de redes sociales suelen pintar un cuadro más optimista que la realidad. Por ejemplo, verás hermosas fotos de tus amigos de vacaciones, pero no de su bebé gritando durante el vuelo. Ten en cuenta este filtro (curación).
3. Identifica y satisface tus necesidades. Irónicamente, FOMO nos lleva a ignorar nuestras necesidades reales. Por ejemplo, necesitamos sentirnos conectados con otros, pero el uso excesivo de las redes sociales interfiere con nuestras relaciones de carne y hueso. Hemos descubierto que cuanto más estés en contacto con tus verdaderas necesidades, tendrás menos miedo de perderte algo.
4. Tómate unas vacaciones en las redes sociales. FOMO lleva al uso compulsivo de las redes sociales, y a medida que vemos que otros se divierten, nos volvemos aún más ansiosos para no perdernos nada. Este proceso autoperpetuante explica por qué FOMO está vinculado a la adicción a las redes sociales. Como con otras adicciones, tenemos que romper el ciclo. Considera la posibilidad de desactivar las notificaciones del teléfono para que no se te pida continuamente que utilices las redes sociales. Incluso puede tomar un descanso temporal y practicar la inmersión en tu vida diaria, y luego ver cómo te sientes después de unos días.
La triste verdad es que el FOMO es una paradoja, ya que el miedo a perderte algo nos hace disfrutar menos de nuestra vida. ¿Cuál es el paso que puedes dar hoy para enfocarte en lo que es real y abrazar la vida?
Artículo original por Seth J. Gillihan. Psicólogo y profesor clínico asistente de psicología en el Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Pennsylvania.