1. Apresurarse en las cosas
En el momento en que conoces a alguien que está remotamente interesado en ti, tu imaginación se apresura a mezclar a los dos en una relación maravillosa y a veces poco realista. No me malinterpretes, alcanzar hitos en las relaciones es emocionante, pero tomar decisiones rápidas sobre tu futuro con tu pareja nunca es aconsejable. Aunque puedes estar ansiosa de poner etiquetas, mudarse juntos, casarse, etc., pregúntate si realmente conoces a esta persona y viceversa. Asegúrate de que la persona es alguien con quien realmente quieres estar, y no sólo alguien que llene el vacío de tu relación.
2. Limitas tus opciones
En la búsqueda de encontrar al chico o chica «perfecto», terminas restringiendo realmente tu grupo de citas. Es importante reconocer que ninguna persona ni relación es perfecta. Quizás te compares con parejas felices en las Redes Sociales que mágicamente comparten las mismas pasiones, la misma rutina de ejercicios y el mismo «entusiasmo» por la vida. Puedes sentir que necesitas esforzarte por alcanzar un nivel de perfección romántica, pero está es la clave: las fotos bonitas no te muestran las discusiones, los celos o la soledad. Todas las relaciones tienen altibajos, y eso es lo que las hace aún más significativas a largo plazo. ¡Así que experimenta un poco! Si tienes un «tipo» de persona que buscas, trata de alejarte de él para ver qué pasa o pídele a un amigo de confianza que te ponga en contacto con alguien. Nunca se sabe con quién te podrías encontrar si se cambia la mentalidad de «pareja perfecta».
3. Profecía autocumplida
¿Alguna vez has escuchado el hecho divertido de que sonreír puede hacerte sentir más feliz? Ahora aplica esto a tu vida amorosa. Si sigues dándote retroalimentación negativa como: «Estaré sola para siempre«, «Nunca encontraré al indicado» o «El verdadero amor no es para mí«, entonces tus probabilidades de encontrar el amor de tu vida disminuirán significativamente. A nadie le gusta una «Nancy» negativa, y la desesperación tampoco es muy atractiva.
4. Estás buscando demasiado
¿Quién no ha oído una historia de una pareja feliz sobre cómo «nunca esperaron» encontrarse? Pero en realidad esto tiene parte de verdad. Puede que sea difícil de creer, pero quédate conmigo un momento: tu verdadera alma gemela te amará por lo que eres. La razón por la que tantas parejas se sorprendieron por su futuro con sus almas gemelas es porque cuando los conocieron, simplemente estaban siendo ellos mismos sin aires añadidos. En lugar de buscar un alma gemela, sé tu propia alma gemela, y cuando conozcas a tu otra mitad, lo sentirás maravillosamente natural.
5. No hacer movimientos
Vale, sé que dije que no deberías buscar demasiado, pero tampoco deberías quedarte en casa todo el día. Ponte en situaciones sociales cómodas en las que puedas conocer gente nueva; amigos de amigos, clubes, etc. Y si por casualidad conoces a alguien que crees que es guay, pídele quedar contigo, o si te sientes atrevida, sé más directa. Salir y pasar un buen rato es un gran primer paso para conocer a los amores potenciales porque estarás con una mentalidad relajada: la perfecta para conocer a tu alma gemela.