Te des cuenta o no, dices mucho sin decir una palabra. Las personas a menudo entienden tu intención y reaccionan ante ti antes de que hables, y ciertamente antes de que logres pronunciar todas tus palabras. Tus sentimientos sobre una persona o situación están arraigados en un nivel no verbal, y las relaciones se basan en estas conexiones. Tus palabras simplemente completan los detalles.
Por lo tanto, si quieres comunicarte de manera más efectiva, presta mucha atención a estas cuatro formas básicas en las que te expresas.
Tono de tu voz: La forma en que dices algo puede marcar la diferencia. Por ejemplo, podrías decir «gracias» cuando tu amigo te corrija en la conversación. Si lo dices con un sonido amable en tu voz, le dices a tu amigo que estás agradecido. Sin embargo, si lo dices con un tono sarcástico en tu voz, entonces transmitirás algo muy diferente.
Volumen de tu voz: Hablar con una voz suave puede ser relajante o reconfortante. Por el contrario, gritar o hablar en voz alta puede ser amenazante o infundir miedo. Por lo tanto, cuando estás enfadado, es más probable que alguien escuche lo que tienes que decir cuando habla en un volumen de conversación que cuando grita. Del mismo modo, cuando alguien tiene miedo, es más probable que usted ayude a calmarlo hablando en voz baja.
Postura: La forma en que dispones tu cuerpo puede decir algo sobre ti como persona, así como sobre tus sentimientos y actitud actuales. En términos generales, tu postura comunica tu sentido de ti mismo, tal como mantenerse erguido como una persona segura de sí misma o encorvada como una persona deprimida. Pero también puede ser una comunicación sobre una relación o interacción. Por ejemplo, inclinarse hacia alguien mientras habla muestra interés. Las personas también tienden a imitar inconscientemente los comportamientos de los demás cuando se sienten en sintonía con ellos, como cruzar las piernas cuando conversan con alguien que cruza las piernas. Volverse hacia alguien, pero en ángulo, muestra interés y compromiso. Por el contrario, mirar a alguien directamente a los ojos a menudo comunica que se está enfrentando, y rechazar esa mirada muestra desinterés. Si bien todos estos comportamientos tienden a suceder inconscientemente, también puedes elegir ajustar conscientemente tu postura para comunicar el mensaje de tu elección.
Expresiones faciales: La gente lee instintivamente las expresiones faciales de los demás. El Dr. Paul Ekman es reconocido por su trabajo que muestra que hay expresiones universales que pueden ser identificadas a través de las culturas, tales como la ira, la tristeza, el disgusto y la felicidad. Aunque puedes estudiar la investigación en esta área para perfeccionar tus habilidades, simplemente necesitas imaginar experimentar una sensación y luego prestar atención a la expresión facial que haces naturalmente. Una vez más, aunque tus expresiones faciales ocurrirán inconscientemente, puedes elegir comunicar ciertos sentimientos cambiando conscientemente tus expresiones. Por ejemplo, puedes mostrar aprobación con una sonrisa y un movimiento de cabeza o desaprobación poniendo los ojos en blanco.
Por lo tanto, cuando quieras comunicarte claramente, haz algo más que elegir tus palabras cuidadosamente. Presta atención a cómo hablas y a los mensajes no verbales que tu cuerpo está enviando.
Artículo original por Leslie Becker-Phelps. Psicóloga.