A veces puede ser difícil encontrar significado y propósito. Pasamos tanto tiempo trabajando y ocupados que nos olvidamos de parar y mirar dentro de nosotros mismos para ver lo que realmente deseamos en la vida.
Afortunadamente, los sabios y místicos a través de los años han encontrado el mismo problema, resultando en una valiosa sabiduría de la que todos podemos beneficiarnos.
El Budismo Zen ha contribuido en gran medida al pensamiento humano sobre cómo podemos vivir vidas más pacíficas y felices.
Hoy vamos a repasar 11 de sus piezas de sabiduría más importantes que pueden ayudarnos a todos a vivir una vida mejor. Estos son los hábitos de los monjes budistas.
1) Concéntrate en una cosa
Este es un punto simple pero clave que simboliza un aspecto importante de la filosofía Zen.
Concentrarse en una cosa es lo que parece: concentrarse en la tarea en cuestión sin distraerse. Lo que sea que esté en su presencia en ese momento, dedíquele toda su atención.
Se ha demostrado científicamente que el cerebro simplemente no puede hacer frente con eficacia a la multitarea. Puede parecer que se está haciendo más, pero en realidad, es probable que no sea así y la calidad del trabajo esté, sin duda, disminuyendo.
Si puedes comprometerte a hacer una cosa a la vez, estarás más comprometido en cada momento y más capaz de vivir una vida pacífica y feliz.
2) Darlo todo
Hacer algo con cada pulso de tu ser significa estar totalmente concentrado en el momento presente.
No estoy hablando de una concentración tensa. Me refiero, en cambio, a centrarse en el momento presente con una concentración pacífica y sostenida.
Estás aquí, viviendo ahora mismo, totalmente comprometido con lo que sea que estés haciendo, y no hay nada más de qué preocuparse.
3) Deja ir lo que no puedes controlar
Dejar ir los apegos es una gran parte de la filosofía Zen.
Cuando te das cuenta de la impermanencia de todo lo que te rodea, empiezas a soltarte y a disfrutar del mundo por lo que es.
Sin embargo, a lo largo de nuestras vidas, muchos de nosotros nos apegamos naturalmente a las relaciones, a los objetos materiales y a las circunstancias de la vida.
Pero al querer mantener estas cosas fijas, resistimos el camino natural del cambio.
Así que, en lugar de continuar esta tendencia, elimina la fricción liberando los apegos y permítete fluir con el universo.
4) Poseer sólo lo que se necesita
Muchos de nosotros deseamos y acumulamos posesiones innecesarias como si fuera una adicción.
Sin embargo, según la filosofía budista, puede ser perjudicial desear objetos superficiales. No da mucho sentido a la vida y puede dejarte en un proceso interminable de deseo cuando la emoción de poseer estas posesiones materiales desaparece.
Cuanto más puedas eliminar «cosas» en tu vida, menos desordenado te sentirás.
Esto no sólo involucra posesiones materiales. Puedes preguntarte qué es realmente importante en tu vida, y enfocarte sólo en tus prioridades más altas.
Una vida simplificada es más agradable y menos complicada.
5) Mantente en contacto con tu salud mental
Consulta contigo mismo de vez en cuando para asegurarte de que estás bien. La vida es agitada y dura, y podemos quedar atrapados en el ajetreo y el bullicio con bastante facilidad si nos dejamos llevar.
También puedes usar este tiempo para reflexionar sobre lo que estás consumiendo, con quién estás pasando el tiempo y qué estás haciendo realmente en tu vida. Cualquier cosa que no añada valor a tu vida podría valer la pena deshacerse de ella.
6) Crear orden en tu vida
Según la filosofía budista, el orden es importante porque nos da verdadera libertad. La mayoría de la gente no ve el orden de esta manera, pero eso es debido a un malentendido.
Tener una estructura diaria en tu vida te permite concentrarte en lo que es importante y organizar el tiempo para ti mismo para simplemente relajarte.
Significa ser consciente de lo que realmente estamos haciendo con nuestro tiempo.
7) Vive como si fueras a morir
Muchos de nosotros vivimos nuestras vidas ignorando completamente cualquier pensamiento de que eventualmente vamos a morir.
Pero la filosofía budista dice que esto es un gran error, porque ser consciente de nuestra impermanencia puede ser una gran fuente de alegría.
Apreciaremos nuestra existencia mucho más porque nos daremos cuenta de que puede que no la volvamos a tener.
8) Usa tus habilidades creativas
Es importante expresarse creativamente. Ya sea poesía, arte, deporte o escritura, usar tus habilidades creativas puede ser una gran fuente para vivir el momento y disfrutar de tu vida.
Nos permite expresarnos plenamente y mantener nuestra salud emocional bajo control.
9) Vivir en equilibrio
Esto significa básicamente que no debemos vivir en ningún extremo de la vida. En cambio, nos esforzamos por mantener un equilibrio.
Es un principio importante que literalmente afecta cada parte de nuestras vidas.
Piensa en dos factores importantes de la vida: el trabajo y la familia. Siguiendo este principio, dedicas la misma cantidad de tiempo a cada uno de ellos, en lugar de concentrarse demasiado en cualquiera de ellos.
10) Practicar la meditación
Esto es quizás lo más importante de todo cuando se trata de vivir una «vida Zen». La meditación te permite conectarte contigo mismo y encontrar la verdadera paz interior.
Pasando 20 minutos al día meditando, puedes aprender a calmar tu mente y liberar cualquier emoción negativa.
11) Vive tu vida al servicio de los demás
Si lo que buscas es una vida plena, o si quieres añadir una alegría inesperada a tu vida, trabaja al servicio de los demás.
Nada puede traerte más paz y prosperidad que anteponer las necesidades de los demás a las tuyas.