¿Alguna vez te has levantado por la mañana fresco y excitado por el día, y mientras estabas en tu estiramiento matutino has sentido un dolor agudo en tu espalda? Sí, todos hemos pasado por eso. El dolor de espalda es, en el mejor de los casos, molesto y, en el peor, debilitante, lo que te impide realizar tus actividades diarias.
Aunque muchas personas experimentan dolor de espalda, las mujeres y las personas de entre 35 y 55 años son las más afectadas. Una de las causas más obvias del dolor de espalda es una posición incómoda para dormir. Algunas posiciones de sueño pueden poner tensión adicional en el cuello, las caderas, la parte baja de la espalda y otras zonas, contribuyendo a los nudos y molestias que sientes cuando te despiertas.
Entonces, ¿cuál es exactamente la mejor manera de evitar despertar con dolor? Aquí hay cinco posiciones para dormir que puedes probar para ayudar a reducir tu riesgo de dolor de espalda.
1. De lado con una almohada entre las rodillas
Para esta posición, permite que tu lado derecho o izquierdo de tu cuerpo haga contacto con el colchón y coloca una almohada entre tus rodillas. Si hay un espacio entre tu cintura y el colchón, puedes agregar otra almohada pequeña allí también. La almohada ayuda a mantener la cadera, la pelvis y la columna vertebral alineadas. Pero asegúrate de no estar durmiendo del mismo lado todas las noches, ya que esto puede llevar a problemas tales como desequilibrio muscular o incluso escoliosis.
2. De lado en posición fetal
Esta posición es especialmente útil si tienes una hernia discal. Comenzando con la espalda, gira suavemente hacia los lados y flexiona las rodillas hacia el pecho, luego dobla el torso hacia las rodillas. Esto ayudará a abrir el espacio entre las vértebras de la columna vertebral, aliviando el dolor causado por una hernia o un disco que ha sido empujado fuera de su lugar.
3. Sobre tu estómago con una almohada debajo de tu abdomen
Dormir boca abajo puede empeorar el dolor de espalda debido a la tensión adicional en el cuello, pero si es absolutamente necesario, agregar una almohada puede ayudar. Puedes tratar de colocar una almohada debajo de la pelvis y la parte inferior del abdomen para aliviar la presión de la espalda. Si es necesario, también puedes intentar colocar una almohada adicional debajo de la cabeza. Esta posición es buena para aquellos con enfermedad degenerativa del disco, ya que alivia la tensión que se ejerce sobre el espacio entre los discos.
4. De espaldas con una almohada debajo de las rodillas
Cuando se trata de aliviar el dolor de espalda, está claro que la almohada es nuestro mejor amigo. Dormir boca arriba es en realidad una de las mejores maneras de aliviar el dolor de espalda, y añadir una almohada. Para comenzar, acuéstate boca arriba y coloca una almohada debajo de las rodillas mientras mantienes tu columna neutral. Si es necesario, puedes colocar una pequeña toalla enrollada debajo de la parte inferior de la espalda para darte más apoyo. Dormir sobre tu espalda causará menos tensión en tus puntos de presión al distribuir uniformemente el peso a través del área más ancha de tu cuerpo. Y la almohada te ayudará a mantener la parte baja de la espalda curvada.
5. De espaldas en posición reclinada
Esta posición puede ser la mejor para aquellos con espondilolistesis istérmica, una afección de la columna lumbar en la que una fractura del istmo hace que un cuerpo vertebral se deslice sobre el que está debajo de él. Dormir boca arriba en posición reclinada crea un ángulo entre los muslos y el tronco, lo cual reduce la presión sobre la columna vertebral. Así que si estás luchando con el dolor de espalda, invertir en un sillón reclinable puede ayudar mucho.
Independientemente de cuál elijas, estas posiciones son excelentes para reducir el riesgo de padecer dolor de espalda y mantener la columna vertebral alineada. Si todavías estás experimentando dolor de espalda excesivo, habla con tu médico.