El amor tóxico es tan dañino como estar en una adicción a las drogas. La relación tóxica se puede asemejar a una relación de posicionamiento lento. Terminar la relación es difícil, y más difícil cuando te sientes involucrado, pero permanecer en la relación tóxica sólo llevaría a la autodestrucción.
En este artículo vamos a definir una serie de rasgos que indicarían que uno de los miembros de la pareja es tóxico. Si sientes estos puntos en tu relación, definitivamente estás en una relación tóxica, y sabrás qué debes haceer por tu propio bien.
1. Afecta a tu identidad
Estás haciendo todo perfecto y de repente tu pareja te muestra una lista de defectos en tus acciones. Hay momentos que puedes incluso pensar que él está diciendo esto para que mejores, pero la crítica no tiene la intención de ser útil, sino más bien para menospreciar. Nunca lo verás feliz y orgulloso de ti. Cuando estás en una relación con alguien que no reconoce tu valor, puede ser difícil verlo por ti misma, eventualmente afectan a tu autoestima y empiezas a dudar de ti. Lo siente cuando estás con una pareja tóxica y sabes lo que debes hacer cuanto antes, mejor
Sólo el hecho de que podamos llamarlos nuestros hace que todo el dolor valga la pena. Nos sentimos como superhéroes con la capacidad de curar las heridas emocionales, pero no nos damos cuenta de que somos nosotros los que nos estamos lastimando.
2. Relación unilateral
Te ves constantemente dejando toda tu energía sin nada a cambio. Recuerda, una relación unilateral nunca puede ser fluida. Si el interés de la otra parte en la relación es sólo un reflejo de él. Lo ves sin comunicarse, y es imposible lograr ningún tipo de equilibrio. El respeto mutuo es el primer requisito de una buena relación. No hay relación sin ese respeto. Punto.
Vale la pena luchar por las relaciones, pero a veces no puedes ser la única que lucha.
3. Siempre es culpa tuya
Con todo, siempre termina siendo tu culpa. Puedes quedarte todo lo que quieras, pero no irás a ningún lado. La confiabilidad mutua es importante para generar confianza y es la base de cualquier buena relación. Es casi imposible que algo positivo salga de una relación llena de negatividad. Si dedicáis vuestro tiempo a evitaros mutuamente, eso dice todo lo que necesitas saber. Si no podéis volver el uno al otro, si os encontráis cambiando de opinión para complacer a alguien más. ¿Hay alguna razón para estar en la relación? Tenlo en cuenta, si no puedes hacer nada bien, tal vez la relación no sea la correcta.
No eres responsable de la decisión que toman los demás; no eres responsable de los comportamientos que hacen los demás; y no eres responsable de cómo se sienten los demás.
4. Fingiendo emociones
Las sonrisas no siempre significan que todo está bien. Constantemente te hace infeliz. No te sientes productiva, siempre estás mentalmente, emocionalmente e incluso físicamente agotada. Creo que es hora de reevaluar tu relación. A veces tu mente necesita más tiempo para descubrir lo que tu corazón ya sabe.
Recuerda, uno tiene el derecho de decir que no cuando le apetezca.
5. Hostilidad
La ira constante es una señal segura de una relación malsana. Nunca debes estar cerca de la hostilidad porque te hace sentir insegura. Si una persona tiene el control, o se está produciendo un tira y afloja constante, es probable que estés gastando demasiada energía en continuar la relación. Las buenas relaciones mejoran tu vida; no la hacen más complicada. Si constantemente estás sacando lo peor de ti, no puedes ser lo mejor de ti misma.
No hay excusa para la hostilidad.