Averigua los errores que puedes estar cometiendo y que te impidan encontrar el amor verdadero.
1. Haciéndolo demasiado fácil
En toda relación heterosexual, homosexual o bisexual, ambas partes tienen energía masculina y femenina. Un hombre masculino quiere sentir que hay un lugar para que él contribuya y haga cosas. Si quieres que un hombre tome la delantera en la relación, entonces haz menos para que tenga que dar un paso adelante y hacer él más. De esta manera él tomará la iniciativa y tú nunca tendrás que cuestionar sus intenciones contigo. Lo sabrás por sus acciones hacia ti. En lugar de facilitar las cosas haciendo demasiado, relájate de nuevo y permítete recibir.
2. No siendo como eres para conseguir amor
Cuando tenemos la chispa de la atracción con alguien, empezamos a modificar nuestro comportamiento en un intento de ser agradable a la otra persona. Pensamos: «¿Cómo puedo presentarme?» o «¿Cómo puedo comportarme para que esta persona me quiera?» Si no te presentas auténticamente desde el principio, entonces es imposible recibir el verdadero amor y la aceptación que deseas. Todos nosotros queremos ser amados por quienes realmente somos, y mostrarnos como tu ser auténtico es la clave.
3. Fingiendo que no tenemos ninguna necesidad
Al principio de una relación vemos a muchas personas que quieren parecer que no necesitan nada. Esto es un gran perjuicio para ti porque tu pareja no sabrá cómo complacerte. Al hablar de tus necesidades, aprenderán cómo hacer que seas feliz. El amor y la atracción no vienen con la capacidad de leer la mente. Al hablar de tus necesidades podrás ver si esta persona está dispuesta a cumplir con tu solicitud. De esta manera podrás identificar rápidamente quién es compatible contigo y quién no.
4. Evitar los conflictos
Nos dicen cosas como: «Escoge tus batallas«. Esto perpetúa la idea de estar en guerra con tu pareja. El conflicto es una puerta a una conexión más profunda. Al evitar el conflicto no nos honramos a nosotros mismos hablando de lo que sentimos. Nuestra alma desea la conexión, pero nuestro ego desea tener razón. Debes estar dispuesta a tener conversaciones incómodas. Cuando dices la verdad, abres la puerta a la intimidad real con tu pareja.