Probablemente has escuchado que el autocuidado es importante – que necesitas tomarte un tiempo para ti mismo y hacer cosas que nutran tu cuerpo y mente. Las actividades de autocuidado a menudo incluyen cosas como hacer ejercicio, dormir lo suficiente, llevar una dieta saludable y tal vez algún tipo de práctica de atención plena (meditación, mindfulness. Todos ello tiene grandes beneficios, pero hay otro método de autocuidado que realmente debería estar en la lista (especialmente porque el objetivo final del autocuidado es sentirse bien) – y es quizás el método más simple de todos: divertirse.
Divertirse es más que hacer cosas que disfrutas, porque incluye una sensación de ligereza. Por lo tanto, aunque te guste leer o hacer crucigramas, probablemente no describas esas actividades como «divertidas». La diversión tiene elementos como alegría espontánea, risa, juego, placer, energía, distracción y humor.
Debido a que las personas son esencialmente seres sociales, es más probable que nos divirtamos cuando estamos con otros. Incluso el simple hecho de ver a otras personas divertirse puede mejorar tu estado de ánimo. Piensa en el deleite que puedes sentir al ver a los niños pequeños absortos en el juego.
Una de las características de la diversión es la risa, que ofrece una manera de que las personas se sientan conectadas entre sí. Por esta razón, es mucho más probable que suceda cuando las personas están con otros que cuando están solas. Además, la risa es contagiosa, lo que hace que las personas que los rodean se sientan más felices y a menudo se rían con ellos. La investigación ha demostrado que ser social y reír libera la tensión, disminuye la ansiedad, alivia la depresión y refuerza el sistema inmunológico.
Las personas también se divierten cuando están físicamente activas haciendo cosas que les gustan. De hecho, es casi imposible imaginarte haciendo una actividad física que disfrutas y no divertirte. Al hacer que tu cuerpo se mueva, desencadenas que libere endorfinas. Y tendrás más energía, obtendrás una mejor perspectiva de la vida, sentirás una mayor sensación de bienestar y estarás más alerta mentalmente.
Por lo tanto, si quieres añadir más diversión a tu vida, piensa en formas en las que puedas hacer algo activo con otras personas. Sin embargo, es esencial que elijas a las personas que te gustan y una actividad que creas que vas a disfrutar. Forzarte a hacer algo que se supone que es divertido es probable que te salga el tiro por la culata. Sería como decirse a sí mismo que «deberías» comer tu postre favorito – digamos, helado de chocolate. Por mucho que te guste el helado, el que te digan que «debes» comerlo puede quitarle algo de dulzura al sabor de ese helado.
Así que, busca a algunos amigos, elige una actividad que te guste y deja que la diversión suceda.
Artículo original por Leslie Becker-Phelps. Psicóloga.
