Todos queremos estar sanos y felices, pero no siempre es fácil. A veces, el trabajo y el estrés se interponen en el camino de la felicidad. Cuando esto sucede, tenemos que realinear nuestra vida y concentrarnos en hacer cambios. Las siguientes ocho señales son cosas comunes que olvidamos hacer. Para ser verdaderamente felices, tenemos que adoptar estos cambios en nuestras vidas.
1. Acéptate a ti mismo
Antes de que puedas aceptar y amar a las personas que te rodean, tienes que empezar por aceptarte a ti mismo. Necesitas amarte a ti mismo antes de poder amar a alguien más. Si hay algo en ti que odias, cámbialo para que puedas empezar a aceptarte a ti mismo.
2. Practica la compasión
Es fácil distraerse con la vida diaria. Te enfadas con un conductor terrible o con un comentario irreflexivo. Cuando esto sucede, tienes que ir más despacio y pensar por qué alguien podría actuar de esa manera. Aprende a ser compasivo con las personas que te rodean. Si no puedes ser compasivo, terminarás experimentando ira, crueldad y celos.
3. Presta atención a tus necesidades
Todos tenemos necesidades en la vida. Si bien quieres ser compasivo y ayudar a otras personas, tienes que recordar que tienes necesidades que deben ser satisfechas. Si eres infeliz en la vida, no ignores tus sentimientos. Presta atención a lo que tu espíritu, cuerpo y mente están tratando de decirte. Tratas una lesión física cuando estás herido, así que asegúrate de tratar también tus lesiones espirituales.
4. Vive tus creencias
Una de las razones más grandes por las que la gente se vuelve infeliz es porque viven de una manera en la que no creen. Tus creencias guían quién eres como persona y qué quieres de la vida. Cuando vives de una manera que es contraria a estas creencias, te sientes culpable e infeliz. Aun cuando sea un reto o un inconveniente, asegúrate de poner en práctica tus creencias.
5. Cumplir con tus expectativas
Otro problema común es que la gente se olvida de sus metas y expectativas. Tienes sueños para tu vida, así que tienes que ponerlos en práctica. No puedes estar limitado por tus miedos acerca de todos los problemas que pueden ocurrir. Tus intenciones guían tu vida y dan forma a cómo experimentas el mundo. Ayudan a anclar tu espíritu en el momento presente.
6. Espera lo inesperado
Este problema es el opuesto al anterior. Algunas personas nunca viven sus sueños porque no se fijan metas ni expectativas. Otras personas experimentan infelicidad porque esperan demasiado. Cuando no se cumplen tus expectativas, experimentas sufrimiento y tristeza. Si bien necesitas tener sueños y metas, también tienes que aceptar el hecho de que los problemas ocurrirán a lo largo del camino. No puedes forzar al mundo a que cumpla tus expectativas. Todo lo que puedes hacer es mantener tus posibilidades abiertas, trabajar hacia tus sueños y adaptarte cuando aparezcan los problemas.
7. Ve por tus sueños
Cuando renunciamos a nuestros sueños, renunciamos a una parte de nuestra alma. Los seres humanos tienen naturalmente esperanzas y aspiraciones en la vida. Si dejas ir tus sueños, dejas ir tus ambiciones y una parte de ti mismo. Nunca tengas miedo de tener sueños e ir tras lo que quieres en la vida.
8. Conviértete en una persona consciente de ti misma
Nadie es perfecto. Todos somos un trabajo en progreso. Para ser una mejor persona, tienes que ser consciente de tus fallos. Una vez que conozcas tus miedos y fallos, puedes trabajar para cambiarlos. Tienes que ser consciente de ti mismo si quieres crecer como persona.