Conocerme Más

Cómo simplificar tu relación con el dinero (y ser más feliz)

Cómo simplificar tu relación con el dinero (y ser más feliz)

¿Es el dinero una fuente de estrés en tu vida? Las finanzas pueden crear tensión en tu vida y en tus relaciones si no las manejas bien. Piensa en el dinero como si fuera energía verde. El dinero puede enriquecer tu vida, al igual que una relación personal con un amigo. Al igual que la energía negativa, puede desencadenar ansiedad. Cuida tu relación con el dinero prestando atención a tus finanzas para obtener un resultado gratificante. Si deseas simplificar tu relación con el dinero, sigue estos tres pasos.

PUBLICIDAD





1. Sé honesto contigo mismo acerca de tus finanzas
Al igual que en una relación con un amigo, tu relación con el dinero mejorará cuando seas honesto contigo mismo sobre tu situación. Tal vez estés compartiendo el alquiler de un apartamento con otras personas y también tenga muchas deudas de tarjetas de crédito o intereses de préstamos estudiantiles que se están acumulando. Ignorar tu deuda no la hará desaparecer. Puedes intentar contactar a un amigo en quien confías y que sabes que es bueno con el dinero o a un asesor financiero para que te ayude a resolver las cosas. Cuando te responsabilices de tus finanzas, comprométete a mirar con cuidado y honestamente a tu situación.

2. Sé realista sobre lo que puedes gastar
Podrías estar ignorando la verdad sobre tus finanzas. Por ejemplo, podrías:

Nada de esto te ayuda en tu relación con el dinero. No eres honesto ni realista. En cambio, consideras la conexión entre tus metas en la vida y tu dinero. Piensa en el futuro. Cuando vayas de compras y planifiques tus compras, considera siempre stus necesidades antes que tus deseos. El alquiler y la comida van antes que el nuevo par de zapatos. Los sacrificios ahora pueden hacer realidad tus sueños futuros. Pregúntate a ti mismo: «Siendo realistas, ¿qué puedo cambiar ahora para alcanzar mis metas en los próximos tres años?»

3. Considera lo que obtienes a cambio
Piensa en lo que gastas como una inversión. Considera siempre lo que recibes a cambio de lo que gastas. Además, cuando hagas algunas compras, considera la calidad por encima de todo. Seamos realistas; a todos nos gusta una buena oferta. ¿Y no ha habido ocasiones en las que no has recibido lo que has pagado? Cuando compras algo que quieres que dure mucho tiempo e inviertes tu dinero en un producto barato, es probable que termines gastando más dinero para reemplazar ese producto. Esta compra no es una buena inversión, ya que si hubieras comprado el producto de mayor calidad al principio, estarías en mejor situación. Considera que la calidad puede ahorrarte dinero a largo plazo.

Recuerda que todas las relaciones requieren trabajo. Por lo tanto, trata tu relación con el dinero con amabilidad. Esta «energía verde» te servirá bien en la vida y te ayudará a alcanzar tus metas.



Salir de la versión móvil